Bogotá iniciará este 18 el nuevo modelo que emplea a 14.414 recicladores.
Cuando falta una semana para que el alcalde Gustavo Petro ponga en marcha el nuevo esquema de aseo en Bogotá con un operador público, poco se sabe del modelo de reciclaje que se iniciará, también este 18 de diciembre y que, según el plan anunciado, pondrá a los bogotanos a seleccionar residuos aprovechables en bolsas blancas y a 14.414 recicladores a recogerlos, en toda la ciudad. (Lea también: ‘No sabemos cuál es el modelo de basuras’: Veedora distrital).
Sin embargo, a la Administración no le quedará fácil sacar adelante el ambicioso programa de ‘Basura cero’, porque exige cambiar la cultura de la población al reciclaje, le ha costado trabajo poner de acuerdo a todos los recicladores, no hay infraestructura suficiente para recibir el material, y detrás hay un jugoso negocio que empieza a mostrar intereses encontrados.
Hoy en Bogotá se reciclan 1.200 toneladas diarias de residuos, de las cuales 1.190 (99,2 por ciento) las alzan recicladores privados y las otras 10 (0,8 por ciento), las empresas de aseo que cubren la ruta oficial del reciclaje.
Los recicladores manejan sus propias rutas y clientes que defienden férreamente, llevan el material a las bodegas donde les pagan según peso, tipo de residuo y tarifa del momento.
Por eso, cuando la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) en sus primeras charlas les dijo a los recicladores que les entregarían zonas para el trabajo, exigieron que se las respetaran y así quedó acordado.
«Los acuerdos se han logrado, pero con los recicladores organizados, porque los independientes -que son el 70 por ciento en la ciudad- no los organiza nadie y no están de acuerdo con nada», manifestó un agremiado. Por eso, se señala que solo la mitad de esta población sabe qué hacer a partir del 18.
El esquema
El plan de la Alcaldía es que las 1.200 toneladas que hoy se aprovechan las recojan los recicladores uniformados y carnetizados.
Ellos, según la instrucción, solo podrán levantar las bolsas blancas y sin abrirlas deberán llevarlas a las bodegas autorizadas. Allí habrá una báscula pública donde pesarán el material y les pagarán por él. Luego, a los dos meses, les consignarán otro dinero por aprovechamiento (recolección y transporte de residuos reciclados), que serían entre 270.000 y 280.000 pesos. Los pagos se harían a través de Aguas de Bogotá. Aunque la Uaesp dijo, inicialmente, que para el nuevo modelo se organizarían más de 30 empresas de reciclaje base, habría 60 bodegas para el pesaje, se constituirían cooperativas y dotarían de vehículos a los recicladores agremiados, la realidad, hasta ahora, es diferente.
El director de la organización Arambiental, Horacio Cárdenas, dijo que «ya no habrá cooperativas sino las que están constituidas».
Los vehículos demoran, porque hasta ahora se abre el proceso para la compra de 100, presupuestados en 9.200 millones de pesos. Mientras, para iniciar este 18, el Distrito alquilaría ocho vehículos, y las organizaciones arrendarían los suyos -mientras la Uaesp les entrega la flota nueva-, para cubrir las 73 microrrutas oficiales que funcionan en la ciudad. Se habilitarían como puntos de pesaje público el Centro de La Alquería, en el sur, y otros 10 más en en diferentes sectores.
El mercado
El mercado del reciclaje mueve 70.000 millones de pesos anuales, dijeron quienes lo conocen.
Al aumentar el volumen de residuos seleccionados, el negocio se va a sacudir y podría llevar a dos escenarios. Uno positivo, si se logra que se reciclen las 5.400 toneladas que se pueden aprovechar en el Distrito y que se calcula podrían generar unos 300.000 millones anuales, equiparables a los ingresos que obtienen las empresas de aseo.
El otro escenario es negativo, porque al aumentar la oferta de material reciclado podrían bajar los precios en las bodegas. Así, los recicladores serían los afectados y no seguirían más el nuevo modelo de reciclaje de Petro.
La pulpa del negocio
Según ha dicho el alcalde Gustavo Petro en reuniones, el reciclaje en Bogotá será ciento por ciento privado, para los recicladores, y que «la pulpa del negocio» está en la industria del reciclaje, hacia donde deben apuntar sindicatos como el del Acueducto. Conocedores del negocio indican que en esta cadena, al reciclador le queda 1 peso, al bodeguero 10, y a la industria que procesa el material, 100. Por eso, las fuertes discusiones entre recicladores de base y Nora Padilla, de la Asociación ARB, a quien ya no ven como su líder, por las bodegas que tiene. Ella rechaza la versión y afirma que «solo lucha por la dignidad del reciclador».
Fuente: http://m.eltiempo.com/colombia/bogota/el-plan-que-sacudira-el-negocio-del-reciclaje-en-la-capital/12437326/1
Otros Links Relacionados
http://m.eltiempo.com/colombia/bogota/no-sabemos-cual-es-el-modelo-de-basuras-veedora-distrital/12437328/1/home
http://www.wradio.com.co/noticias/actualidad/veedora-distrital-no-sabemos-cual-es-el-modelo-de-basuras/20121210/nota/1809007.aspx
http://contacto-latino.com/news/6822337/no-sabemos-cual-es-el-modelo-de-basuras-veedora-distrital-eltiempo-com/
http://www.eltiempo.com/colombia/bogota/distrito-no-puede-cerrar-relleno-a-operadores_12438401-4
http://www.elespectador.com/noticias/bogota/articulo-391535-algo-huele-mal